Puedes quitar fácilmente la suciedad de las patas de tu mascota antes de tocar muebles o alfombras, lo que te permite caminar con el perro con comodidad. No tendráshuellas de barro en el sofá y el suelo se mantendrá siempre limpio.
Primero vierta agua y detergente, coloca la pata del animal en el limpiador de patas, coloca la taza de arriba hacia abajo o gira la taza para limpiar la pata. Por último, limpia las patas del perro con una toalla suave.
El limpiador portátil para patas de perro está hecho de cerdas de silicona suave, que no harán sentir ningún tipo de dolor a nuestra mascota durante la limpieza. Las cerdas de silicona también pueden utilizarse como cepillos de baño y cepillos de belleza para mantener al perro limpio y seguro.
Garantía de seguridad.
Tu satisfacción es nuestra mayor prioridad y nos encantaría tu opinión sobre cómo mejorar nuestros productos. Si por alguna razón, no cumplimos con tus expectativas, por favor ponte en contacto con nosotros y con gusto te devolveremos el dinero.
“De casta le viene al galgo, ser rabicorto y patilargo. ” — Refranero español
“Más corre el galgo que el mastín, pero si el camino es largo, más corre el mastín que el galgo. ”— Refranero
“...no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua,rocín flaco y galgo corredor”. ”— Don Quijote de la Mancha
Limpiador de piernas de perro portátil está compuesto por cepillos y tazas, lo que es muy conveniente para viajar. Este limpiador de garras de perro está hecho de un cepillo de silicona suave, muy suave, que puede limpiar y masajear las garras de perro sin causar molestias a los perros. Puede eliminar eficazmente la suciedad y las bacterias de las garras de las mascotas y mantener a las mascotas sanas.
Sólo vierte una pequeña cantidad de agua y champú, inserta las garras fangosas y sucias en la taza, mueve la taza hacia arriba y hacia abajo o la gira para limpiar las garras. Limpia suavemente las patas con una toalla.
Es la única raza de perro específicamente nombrada en la Biblia.
Antiguamente, el galgo estaba reservado únicamente para los nobles, aristócratas y por supuesto la realeza.
La mayoría tienen un instinto cazador muy elevado que se despierta ante la mínima ocasión de actuar como depredador.